Victoria Sánchez ofreció discurso sobre el extensionista como figura estratégica para la difusión de las actividades culturales de la UAEH.
La Directora de Orquesta venezolana y actual encargada de la Coordinación de Extensión de la Cultura en el Instituto de Artes de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, presentó el pasado diez de agosto el discurso El Extensionista, en el marco del encuentro realizado por la División de Extensión de la Cultura presidida por Marco Antonio Alfaro en el Auditorio Josefina García Quintanar.
El Extensionista
“En nuestra máxima casa de estudios, existen veintiún extensionistas. Seis para las preparatorias, seis para los institutos y nueve para las escuelas superiores; además de dieciocho por confirmar para las escuelas incorporadas. Pero, ¿qué es realmente un extensionista, qué cualidades tiene y qué lo convierte en una de las figuras más estratégicas de nuestra institución?
Mi nombre es Victoria Sánchez, actual encargada de la Coordinación de Extensión de la Cultura en el Instituto de Artes de la UAEH y expondré mi percepción al respecto.
¿Qué es un Extensionista?
Para definir qué es un extensionista, vayamos a la raíz del asunto y definamos la palabra extensión: es la propiedad de los cuerpos de ocupar un espacio. Tiene que ver con su amplitud, tamaño, cabida; está relacionado con esparcir, derramar lo que está junto, desplegar, desenvolver.
Todo esto me recuerda (por experiencia de vida), una palabra que utilizamos en mi país para ilustrar la manera en que se dan los procesos del proyecto en el cual crecí, ese proyecto se trata de un sistema de orquestas sinfónicas y la palabra en cuestión es raigambre. Creo que está muy relacionada con la esencia del concepto con el cual buscamos definir la figura del extensionista.
Ahora bien, ¿qué es raigambre? Es un conjunto de raíces generalmente entrecruzadas, es el medio de comunicación subterráneo de los árboles, por allí comparten contenido, nutrientes, información. También se puede asociar al conjunto de antecedentes, tradiciones, hábitos o efectos que fusionan una cosa con otra. Entonces, tenemos esta palabra, raigambre: raigar, del latín radicare, echar raíces; y ambre, que en castellano permite dejar constancia de que se está hablando en colectivo.
Por aquí comienza para mi, la esencia de lo que implica ser un extensionista. Es parte y a la vez responsable de esa raigambre que se interconecta sabiamente, permitiendo nutrir y sacar a la luz todo lo relacionado con las actividades culturales que se llevan a cabo en nuestra universidad.
Direcciones. Conectándonos con arte.
Con la misión de contribuir al desarrollo integral de la comunidad universitaria y la sociedad hidalguense a través de la promoción cultural, el fomento del deporte y la producción intelectual para generar una sociedad más justa y democrática formada por individuos que desarrollan el pensamiento creativo, el espíritu crítico, el aprecio por las artes, la ciencia, el deporte, el medio ambiente y la diversidad cultural, en un ambiente de respeto, honestidad, tolerancia y compromiso social, la División de Extensión arropa las siguientes direcciones:
- Promoción Cultural
- Ediciones y Publicaciones
- Educación y Promoción Deportiva
- Fomento a la Lectura
- Festival Internacional de la Imagen (FINI)
- Feria Universitaria del Libro (FUL)
- Museo Casa Grande
- Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (OSUAEH)
Desafíos. Mientras mas grandes, ¡mejor!
Tengo la absoluta certeza de que todo proceso de liderazgo, requiere un arduo trabajo de consciencia que comienza dentro cada uno de nosotros mismos.
Enfocando el tema en la responsabilidad de extensionistas que hemos asumido, me tomo el atrevimiento de plantear lo que considero que son nuestros más destacados desafíos.
Capacidad de diálogo y equilibrio:
Al ser los principales impulsores de los procesos de difusión y retroalimentación de las actividades culturales, es de suma importancia contar con redes de contacto que nos permitan prever escenarios en un ambiente de tolerancia, sabiendo que el secreto para una buena comunicación es permitirnos escuchar de manera asertiva y empática.
Acceso a la información y respaldo de la alta dirección:
Me parece primordial que todos podamos tener conocer la base de datos de cada una de las actividades que realizamos. Además, creo relevante también el hecho de sentir la confianza que da el contar con el respaldo de quienes llevan la batuta de la institución para, en caso de presentarse eventualidades y de ser necesario, elaborar planes de acción que conserven la objetividad y que se ajusten a la veracidad de los hechos.
Integración multidisciplinaria:
Como extensionistas, también nos corresponde expandir nuestra capacidad de aprendizaje, absorber las últimas tendencias en comunicación e implementarlas eficazmente a cada actividad que realizamos.
¡Adiós, prejuicios!:
Sin mucho maquillaje, no se trata de ideales decorativos, sino de comunicar y dejar claro con total convicción el propósito de la UAEH y su vital importancia como una de las principales arterias en la construcción del país
Misión investigadora:
Compatibilizar la experiencia con una producción sostenible de estudios, ensayos y publicaciones de las actividades.
Relaciones públicas 2.0:
Este es un tema para tener constantemente actualizado, sobre todo en el actual contexto global en el cual estamos inmersos, donde los usuarios sancionan fuertemente la mala praxis en las redes sociales.
Multiculturalidad:
Esto, teniendo en cuenta que se trata de la existencia de varias culturas que conviven en un mismo espacio físico, geográfico o social y abarcando las diferencias que se enmarcan dentro de la cultura, ya sea, religiosa, lingüística, racial, étnica o de género. Todo esto nos permite fortalecer nuestros procesos de innovación.
Responsabilidad social:
Nuestra columna vertebral, estipulada claramente en la misión de la UAEH. Es importante ejercerla resguardando nuestra naturaleza ética y de impacto altruista.
Internacionalización, sentido de pertenencia, inclusión de pueblos indígenas.
Para concluir, creo que lo más importante de nosotros como extensionistas y como seres humanos, es nunca olvidar de dónde venimos y saber siempre a dónde vamos, teniendo presente que para ser un gran líder, primero debemos aprender a ser un buen servidor.
Motivar e inspirarnos primero a nosotros mismos, ser nuestra mejor versión. Las personas no siguen lo que decimos, sino lo que hacemos. Disciplina, persistencia… Pasión, visión y
resultados.”
