Amor y guáramo para crear y dirigir mi mundo
¡Hola, chic@s!. Bienvenidos a esta primera publicación de La Victoria Maestra. Estoy emocionada por compartir mi experiencia siendo Directora de Orquesta a lo largo de este infinito camino de la música, que es lo que más me apasiona y donde definitivamente hay que tener amor y guáramo.
Actualmente, siento que el 90% de la formación que he recibido, ha estado enfocada en un arduo trabajo de consciencia. Arduo porque no siempre ha sido color de rosas, se trata de un reto constante. Muchas veces he sentido frustración, he llorado e incluso me he preguntado mil veces el chocante: ¿Por qué a mi? (¡qué horror!, nada peor que alimentar el ego de víctima). Definitivamente ha sido un proceso de crecimiento espiritual a través de sinfonías, conciertos, musicales y muchísimas notas más. Amor y guáramo para crear y dirigir mi mundo, para emprender el viaje más maravilloso, el que va hacia dentro.
Hablando de “guáramo”
Hablando de “guáramo”, eso que tiene que ver con la valentía, con el atreverse sin temor a nada y saber superar de manera exitosa las situaciones que se nos presentan. Ismael Cala, en su artículo “¿Qué es el éxito?”, menciona: “siempre digo que el éxito es un camino, no un destino. Una salida que puedes diseñar según tu propio estilo”. Y es que tomar la decisión de emprender un nuevo reto, es la primera muestra de amor y guáramo hacia nosotros mismos, ya sea para dirigir una orquesta, comenzar una nueva rutina de ejercicios en el gym, hacer un cambio en la manera en la que te nutres y alimentas, o dejar ir esa relación tóxica que drenaba tu energía. Sé que esto último de “dejar ir”, no es algo tan sencillo en la práctica. Millones de veces me he quedado enganchada cuando comienzo a ensayar con una orquesta (sobre todo si se trata de una orquesta profesional), en situaciones con personajes como: el tipo que te juzga o pretende verte como alguien inferior a él por el hecho de ser mujer (y no aceptar su invitación a salir); la que te critica y crea matrices de opinión terribles sobre supuestos hechos de tu vida que ni tú conoces; ¿qué se puede hacer?, ella tiene una necesidad insuperable de actuar así porque no soporta sus inseguridades. También están quienes creen que lo pueden hacer mejor que tú, y seguramente sí, ¿por qué no?; pero en ese preciso momento, es a ti a quien le toca estar ahí.
Estas situaciones, que al comienzo me llegaron a afectar muchísimo, también me dejaron como lección que siempre tengo dos opciones, derrumbarme o crecer; aprendí que lo que otros dicen de mi, define casi por completo el tipo de personas que ellos son. Así que, “dejar ir” es cuestión de práctica y hoy puedo afirmar con absoluta convicción, que sí se puede lograr.
Todo cambio de percepción que estemos deseando aplicar en nuestra vida, requiere amor y guáramo; requiere también que nos tratemos y nos hablemos con cariño, que tengamos siempre la certeza de lo valiente que somos. Por ejemplo, para haber realizado un concierto maravilloso con un resultado feliz, tuve que haberlo decidido y decretado previamente. Es a partir de ese momento, cuando comienzas a diseñar el camino; investigas, te dejas inspirar, te metes de lleno en el proceso, organizas tus horas de estudio y estructuras tus ensayos. Ya tomaste las riendas, asumiste el reto y comienzas a disfrutar la preparación física, emocional, académica y espiritual para regalarte con alegría tu próxima meta y aprender todas las lecciones que ella tiene para ti.
Amor por lo que haces…
Aprovecharé el momento para compartir una cita del gran Steve Jobs, relacionada con el amor por lo que hacemos:
Tu trabajo va a llenar gran parte de tu vida, y la única forma de estar realmente satisfecho con él, es hacer lo que creas que es un gran trabajo. Y la única manera de hacer un trabajo genial es amar lo que haces. Si no lo has encontrado, sigue buscando. No te detengas. Al igual que con todos los asuntos del corazón, lo sabrás cuando lo encuentres. Y, como cualquier gran relación, sólo se pondrá mejor y mejor, conforme los años pasen. Así que sigue buscando hasta que lo encuentres. No te detengas. – Steve Jobs
Para tener presente…
Recuerda que este es un proceso único como tú. Es tú mundo y tú lo diriges. No existe otro momento ni otra experiencia de vida similar a la que estás experimentando. Si el reto toca tu puerta, es porque estás list@, porque tienes las herramientas necesarias y porque ya ha llegado el momento de ir a un nuevo nivel. Así que agarra tu batuta, crea y dirige tu mundo con amor y guáramo.
Gracias por compartir tu tiempo conmigo. Si te gusta, no olvides compartir esta información.